"No necesariamente se debe hablar de voluntariado corporativo como de una herramienta de marketing o de branding. El valor del voluntariado corporativo se encuentra en un porcentaje elevado dentro del ámbito de “motivación”, por lo que empresas como Ericsson buscan poder ofrecer este tipo de programas para ayudar a sus empleados a “hacer la diferencia”. Son programas que motivan el empleo de nuevos colaboradores, la retención de trabajadores y que crean un “orgullo corporativo” entre todos los empleados. Este tipo de voluntariado “fomenta la identificación de los empleados con la empresa y ayuda a que se sientan satisfechos de trabajar en una compañía que se preocupa por la comunidad” recalca el Estudio sobre el estado del voluntariado corporativo en España (2010) publicado por el Club de Excelencia en Sostenibilidad.

Lo importante es abrirles las puertas a los empleados que busquen esta singular manera de aplicar sus conocimientos. De esta forma, indirectamente, sus colegas, familiares, amigos y entorno cercano conocerán a la empresa a través de los relatos del voluntario motivado. Branding? Muy probable, pero ni intencional ni planificado, simplemente humano y personal. ¿Qué actividad puede llegar a tener un efecto tan directo como aquella relatada por una persona y que te llega al corazón? Pero la “motivación” espontánea no surge por un milagro. Es imprescindible que la actividad voluntaria esté al 100% alineada con la visión, la estrategia y los valores empresariales. Siendo así, el voluntario representa a su empresa, a la marca y a sus valores en su propia persona.

Patricia Polvora, Communication Officer Ericsson Response, Ericsson